En el mundo moderno, pocas casas se compran y venden completamente por Internet, mientras que casi cualquier otro producto se transacciona millones de veces por este medio
El sector de bienes raíces, y en particular el de vivienda, ha sido históricamente uno de los más lentos en adoptar nuevas tecnologías para optimizar y reducir fricciones en el mercado. La razón principal es que las personas prefieren abordar este proceso de manera conservadora, debido al riesgo y al compromiso financiero que implica. La gente prefiere visitar las casas físicamente, firmar documentos en papel, obtener sellos notariales, estrechar la mano y ver cara a cara al vendedor o comprador, entre otras condiciones que dificultan la adopción de nuevas tecnologías en el mercado.
En el mundo moderno, pocas casas se compran y venden completamente por Internet (una innovación de los años 80), mientras que casi cualquier otro producto se transacciona millones de veces por este medio. Claramente ejemplificado en los 231,000 millones de dólares que Amazon vendió en el 2023 online, de los cuales ninguno fue para la compra o venta de viviendas.
La Inteligencia Artificial Generativa (IA) no ha sido la excepción en cuanto a su lenta adopción en este sector. Los usos más exitosos identificados son relativamente básicos: chatbots que ayudan a generar flujos conversacionales, la programación automatizada de citas y las mejoras en las descripciones de los inmuebles publicados en portales de anuncios. Estos procesos los conozco de primera mano tanto por las experiencias de compra y venta de vivienda de Tuhabi, como por la mejora en los listados de Propiedades.com.
Estos desarrollos ayudan a los usuarios a autogestionar sus procesos de venta de inmuebles y aumentan las probabilidades de éxito en la venta. Sin embargo, no son suficientes para llevar al sector a un nivel de velocidad transaccional equivalente al de otros mercados con mayor adopción tecnológica. Las siguientes dos etapas en el roadmap del desarrollo de la IA Generativa, según Sam Altman, CEO y co-fundador de Open AI, prometen solucionar este problema.
Los cinco pasos definidos por Altman en el desarrollo de la IA generativa son: “Conversadores”, “Razonadores”, “Agentes”, “Innovadores” y “Organizaciones”. Actualmente, nos encontramos en el paso número dos, Razonadores. Los modelos actuales nos permiten conversar (chatbots) y razonar, pero no son capaces de asesorar efectivamente y de manera autónoma a un comprador o vendedor de vivienda en su proceso transaccional. Hasta ahora, solo son capaces de resolver algunas dudas en función de preguntas específicas planteadas por el usuario. El desarrollo de “Agentes” e “Innovadores” podrá resolver esto y hacer que las personas finalmente sientan la confianza necesaria para comprar y vender una casa a través de Internet.
Los Agentes permitirán a los usuarios interpretar de manera correcta y precisa los contratos asociados a la transacción de una vivienda, dentro de cualquier marco normativo. Además, al contrastar millones de datos, los Agentes podrán ayudar a los usuarios a entender si la transacción se está realizando a un precio justo y resolver muchas otras fricciones que actualmente dificultan la transaccionalidad de vivienda. Finalmente, cuando contemos con modelos “Innovadores”, estos permitirán a los usuarios resolver retos como “cuál es la mejor propiedad en el mercado para mis necesidades” de manera autónoma, iniciando procesos transaccionales sin necesidad de supervisión de un humano.
Con estos avances en IA Generativa existe la verdadera promesa de construir un mercado inmobiliario de vivienda más ágil y que maximice los beneficios de los actores que participan en él. Es crucial para las organizaciones que participan de este mercado adoptar activamente estas tecnologías, pues de no hacerlo se verán rezagadas y probablemente perderán su mercado, lo cual sería una novedad en una industria históricamente poco innovadora. Finalmente, nada de esto va a ser cierto, si las instituciones públicas no se abren al cambio y empiezan a tolerar más tecnologías dentro de sus procesos.
** El autor es Economista y Máster en Urban Informatics de la Universidad de Nueva York. Ha trabajado tanto en el sector público como en el privado enfocado en el uso de datos y de la información para la planeación y el desarrollo urbano. Actualmente se desempeña como Vicepresidente de Data & Analítica en la proptech Tuhabi.